Determinar el estado nutricional (EN) de los pacientes con ictus.

Establecer la relación entre el estado nutricional y la evolución precoz

Estudio de cohortes de los pacientes mayores de 65 años, atendidos en el servicio de Neurología del Complejo Hospitalario (Cáceres) diagnosticados de ictus entre Enero y Abril de 2015. Muestreo consecutivo.

El estado nutricional se estableció por el cuestionario Mini Nutritional Assesment (MNA) y la determinación de valores antropométricos.
Analizamos las características demográficas del paciente (sexo, edad, nivel socioeconómico) y las características asociadas al ictus (gravedad del ictus con la escala National Health Interational Stroke (NIHS)); factores de riesgo cardiovascular y estancia hospitalaria.

El estudio fue aprobado por el Comité de Ética y todos firmaron el Consentimiento Informado.

Definimos la evolución precoz según la aparición de complicaciones sistémicas y neurológicas y la situación funcional al alta hospitalaria mediante el índice de Barthel (IB).

Incluimos a 66 pacientes, el 87,9% con ictus isquémico. La edad fue de 77,59 (DE:7,45), varones el 57,6% y la hipertensión fue el factor de riesgo vascular más frecuente (62.1%). Al ingreso la puntuación en la NIHSS fue de 6,62 (DE:6,41). El EN basal, el 18,2% estaba normopeso, el 47% en sobrepeso y el 27,3% obesidad. El Índice de Masa corporal (IMC) medio fue de 27,91(DE:5,34). Según la MNA el 60,6% presentaba un EN normal, el 31,8% riesgo de malnutrición y el 7,6% ya presentaba malnutrición. El 39,4% presentó complicaciones, su aparición se asoció a una menor puntuación en la MNA (22,54 (DE:4,67) vs 24,75 (DE:3,39) p=0,030). Al alta la puntuación media en el IB fue de 69,60 (DE:34,73), siendo el 53,4% de los pacientes dependientes. El IB al alta se asoció con el EN basal (r=0,486;p<0,001). Además, se encontró relación entre el EN y los días de estancia (r=-0,274;p=0,026).

Durante la hospitalización, se observó como los que presentaban complicaciones eran pacientes más mayores (p=0,003), y con una mayor estancia hospitalaria (11,73 días (DE:5,07)vs6,63(DE:3,64);p<0,001).

el estado nutricional al ingreso se asoció con el desarrollo de complicaciones y una peor evolución funcional precoz. Por tanto el estado de malnutrición puede suponer una situación clínica de riesgo para la evolución precoz en los pacientes con ictus.

Determinar el estado nutricional del paciente con ictus al ingreso, corrigiendo los estados de desnutrición o en riesgo, nos permitirá desarrollar cuidados encaminados a prevenir la aparición de complicaciones que influyen en el pronóstico funcional.